1. Aliado perfecto en ferias, expos y eventos

Si participás de eventos, ferias comerciales o exposiciones, sabés lo valioso que es tener todo a mano. Un portfolio con cierre te permite llevar:

• Tarjetas personales o volantes.

• Un block para tomar notas rápidas de reuniones o presentaciones.

• Documentación o catálogo de productos.

• Un bolígrafo y hasta tu tablet o celular organizados.

Además, da una imagen profesional y prolija cuando te encontrás con potenciales clientes o partners. No más papeles sueltos o búsquedas desesperadas en la mochila.

2. Presentación de proyectos para freelancers o creativos

Diseñadores, arquitectos, fotógrafos, redactores… un portfolio no es solo un accesorio, ¡puede convertirse en una herramienta de presentación!

Usalo para:

• Llevar muestras impresas de tu trabajo.

• Tener tu discurso o presentación escrita, bien organizada.

• Guardar contratos, presupuestos o fichas técnicas.

La carpeta en símil cuero proyecta seriedad, sin perder estilo, y te diferencia del resto con un detalle que suma valor.

3. Tu espacio de organización personal

¿Y si te dijéramos que también puede ser tu espacio privado para organizar tu semana, tus ideas o tu vida personal?

Muchas personas lo usan como:

• Agenda creativa o bullet journal.

• Carpeta para recetas, planes de viaje o listas.

• Diario de proyectos personales o metas anuales.

Con cierre, compartimentos y un block siempre listo, el portfolio se transforma en un rincón portátil de inspiración y productividad.

🖋️ En resumen...

Una carpeta tipo portfolio no es solo para ejecutivos. Es para quienes valoran la organización, el estilo y la funcionalidad en cualquier ámbito. Ya sea que vayas a una reunión, a una feria o simplemente a un café con ideas bajo el brazo, este accesorio puede acompañarte todos los días.

¿Ya pensaste cómo lo vas a usar vos?